jueves, 18 de septiembre de 2008

Necrotube





La capacidad del ser humano de buscar lo viejo y lo conocido en lo nuevo y desconocido es, me da por pensar, mucho mayor que su capacidad de aceptar innovaciones absolutas.
Por ejemplo, la fotografía tardó décadas en sacudirse de encima los límites del retrato pictórico, el cine las rémoras de su descendencia del lenguaje teatral (Pasó tiempo hasta que a alguien se le ocurrió mover la cámara en vez de hacer entrar y salir a los actores por un lateral)
Por mucho que la publicidad trate de vendernos la idea de que somos inquietos y trepidantes, la verdad es que la tendencia a volver a lo conocido no es fácil de vencer. Lo nuevo nos asusta mas facilmente que nos fascina. A veces por suerte.

Todo esto viene a raíz de una de esas incursiones por Youtube, en las que un video te lleva a otro y acabas donde no lo esperabas. De repente, buscando algo de Gothiferio musical francés, y entre los chascarrillos y graffitis animados que abarrotan youtube, me di cuanta de que había una especie de Camposanto virtual. Clips en homenaje a difuntos. Encontré muchos en francés, supongo que por los parámetros de la búsqueda. No pondré los links por una cuestión de respeto. (No es que no me fíe de vosotros, pero como ésto es un campo abierto y nunca se sabe quién te lee, ni a que hora , ni con que nivel de alcohol en sangre...) Y me quedé pensando que al final conseguiremos que efectivamente, todo esté en la web Nuestra partida de nacimiento, nuestro currículum, nuestro diario y nuestra lápida. Internet será como ese "Doble" fantasmal del mundo que postulan algunas religiones primitivas, donde mora la imagen de las cosas, y donde mejor no tocar nada, porque en el mundo real las cosas "Cambian".
Lo más avanzado y lo más primitivo de nuestra naturaleza vuelven a coincidir cuando la idea de la muerte esta en juego. Tal vez a la mayoría no le guste pensar en ello, pero la única tecnología que busca el ser humano es la que burla a la muerte. Desde el diente artificial de silex para defenderse del oso, hasta el pulmón de acero, pasando por los "Paliativos " de la muerte: el embalsamamiento, el album de fotos, el clip en Youtube...

Así, esa chiquilla muerta en Auvernia tiene un monumento funerario que ningún faraón hubiera podido soñar.
Eso si. Puede que, en el fondo, mas fantasmal y efímero.

Y cuando mi lado más cínico empezó a preguntarse si habría cementerios virtuales, y si habría alguien dispuesto a pagar por ser "Necrologizado" en ellos...
http://catless.ncl.ac.uk/VMG/
http://www.inmemoryof.co.uk/
http://www.eladios.com.ar/
( Puedo ponerlo, al fin y al cabo son empresas)
También los cadáveres virtuales son abono
para los campos informáticos de los que otros comen.
Y para no cansar...Una pequeña reflexión.

¿Que sucedería si en vez de enterrar a los muertos ,embalsamarlos, incinerarlos, decirles misas, llevarles flores, rezarles con palabras desgastadas... dedicásemos dos minutos al día a meditar sobre en qué han enriquecido nuestras vidas?

miércoles, 17 de septiembre de 2008

Madrid. Atardedecer de domingo. Otoño




Madrid crece sobre alcantarillas llenas de cadáveres. Dos ratas por habitante y otras tantas palomas, que de vez en cuando tiñen el asfalto. Sólo se paran a mirarlas los niños, nene caca.
La gente guapa de gran vía sale de los musicales corriendo hacia sus televisores, acelera para adelantar al pirado que habla por un teléfono móvil inexistente, inmunes al resto de cordura de ese hombre derrotado que, por lo menos, finge hablar con alguien a través de algo. Psicofonía de un alma muerta para la cordura, que aún se aferra a un "otro" que no sabe o se niega a contestar. Atravieso la fila de putas novatas que tiritan, inocentes del frío que no saben que van a pasar, welcome to Madrid. ¿Porqué le doy a una dos euros para un bocadillo? No por ser una buena persona. Y me encojo de hombros y esquivo toreramente la caricia mercenaria y sonrío. Dos euros. Que barato sentirse tan tonto, y a la vez infantilmente menos... mal.
Aprieto el paso, esto no es Manhattan y yo no soy Bukovski.
Rezo a mi dios de infinita ausencia, suplico un poco de tibieza, agua limpia sobre mis moratones, esta ha sido una semana de golpes y más golpes, y la puerta de mi casa se abre con sonido de campana que anuncia final de round.
Pero en vez de chicas en bikini pasean la pancarta palomas muertas, aplastadas, ratas destripadas, y en mi rincón el cubo está repleto de lagrimas de puta y cuajarones de sangre.
Y escribo con los dientes apretados, mordiendo el bucal.
Me coso las heridas con palabras.
Me siento hermoso como crucificado
en la cuadruple sombra de los púgiles bajo los focos.
Suena la puerta de nuevo.
Adelante.
No, no quiero otro asalto...

Sólo tengo una piruleta con un corazón partido para ti.